¿SE PUEDE PERDONAR UNA INFIDELIDAD?
- Psic Ernesto Segura
- 2 ago 2017
- 6 Min. de lectura

La respuesta es que sí, se puede perdonar una infidelidad de una mujer u hombre, ya sea en el noviazgo o matrimonio.
Hay varios factores que determinan si la pareja se puede reconciliar. Entre ellos, la personalidad de la persona que sufre la infidelidad, si ambos quieren seguir con la relación, cómo fue la infidelidad, la edad de los miembros de la pareja, si hay hijos o no, incluso la situación económica…
La infidelidad es una experiencia muy dolorosa para la pareja:
La confianza se ha quebrantado y surgen muchas dudas.
Aumentan las sospechas por posibles nuevas infidelidades.
Se tiende a pensar que el miembro de la pareja que cometió la infidelidad esta en deuda.
Hay más control por parte del miembro que sufrió la infidelidad.
¿Se puede continuar con la relación? ¿Es eso lo que ambos desean? ¿Cómo se hace para restablecer un vínculo saludable? ¿Es posible que la pareja se fortalezca luego de una infidelidad o es mejor poner punto final a este asunto? ¿La infidelidad será una herida que nunca sanará?
Si bien muchas parejas se separan sin ser capaces de superar la infidelidad, otras continúan con su relación, pero para que el vínculo sea saludable para ambos en el futuro, el perdón debe existir.
1-¿Estas dispuesto a perdonar?
Un estudio llevado a cabo por la Universidad de Missouri-Kansas City ha encontrado que las parejas que se fortalecieron después de una situación de infidelidad fueron aquellas donde el engañado/a pudo realmente perdonar a quien le fue infiel.
La investigación reveló que el perdón fue fundamental para superar el dolor asociado con la infidelidad, siendo más importante que el tiempo, el compromiso y la satisfacción encontrada en la relación.
El perdón es lo más importante para lograr un “crecimiento post-traumático”, es decir, para que una experiencia negativa como la infidelidad pueda transformarse en algo positivo y brindar un nuevo sentido a la vida en pareja, fortaleciéndola y también fortaleciendo a sus integrantes individualmente.
2-¿Realmente quieres perdonar?
Muchas personas afirman que jamás perdonarían una infidelidad, pero llegado el momento, cuando hay muchos sentimientos en juego y tal vez muchos años de vida en conjunto, esta perspectiva suele cambiar, o al menos, pierde certeza.
Cuando la infidelidad se descubre es probable que la familia o los amigos más cercanos, generalmente con las mejores intenciones, se atrevan a dar consejos sobre si perdonar o no a la otra persona.
Pero no debes dejar que estas opiniones influyan sobre tu decisión. Debes decidir si deseas continuar con la relación de manea consciente, conectándote con sus sentimientos para determinar qué es lo que realmente deseas.
Es natural que al principio no tengas claro qué sientes o qué deseas para el futuro,pero al pasar algunos días las emociones más fuertes pasarán y tus ideas poco a poco se aclararán.
3-¿Cómo ha sido la infidelidad?
No es lo mismo una infidelidad que sucede une vez de manera casual que haber tenido una relación paralela durante años. Tampoco se vive la misma situación si la relación de ustedes era relativamente buena como si, por el contrario, discutían con mucha frecuencia.
Es posible que estas dos situaciones, bien diferentes, den lugar a distintas maneras de vivir o sentir la infidelidad, o tal vez no, porque en los sentimientos y el dolor que provoca una infidelidad en realidad no existen reglas.
De todos modos es importante, antes de intentar emprender el camino del perdón y reconstrucción de la pareja, discernir si ambos desean continuar con la relación o no. Ambos deben tratar de analizar cuáles fueron las razones que dieron lugar a esta situación, en donde posiblemente los dos tuvieron un cierto grado de responsabilidad.
Tal vez valga la pena intentar continuar con un matrimonio de muchos años si la infidelidad fue algo casual, de solo una noche. O tal vez lo mejor sea separarse si él o ella en realidad siente que vuestra relación ya no puede continuar.
La infidelidad también puede ser producto de la incapacidad para manejar los sentimientosque pueden surgir dentro y fuera de la pareja. Algunas personas no le dan el suficiente valor a la relación que tienen y creen que una infidelidad casual o sin importancia aparente no hará daño.
Otras veces, los sentimientos de inferioridad, la baja autoestima o la adicción al sexo pueden ser la causa de la infidelidad. Es importante establecer cuáles fueron los factores que provocaron de algún modo la situación para trabajar sobre estos problemas y superarlos, si es que ambos desean seguir juntos.
Cada caso es particular, y en realidad no hay reglas. Pero tanto si deciden seguir juntos como si no, el perdón siempre es necesario para superar el dolor.
4-Perdonar y continuar
Si después de haberlo meditado y charlado, ambos están de acuerdo en intentar reconstruir la relación, el perdón hacia la persona que fue infiel debe apoyarse sobre algunos pilares fundamentales:
Admitir el error
Quien engañó debe admitir que se equivocó, que la infidelidad fue realmente un gran error y no debe buscar excusas intentando disculpar su comportamiento. Si asume su responsabilidad, se muestra arrepentido/a y afirma que nunca más volverá a suceder, entonces tal vez puedas comenzar a pensar en perdonar, si es que así lo deseas.
Actuar en consecuencia
Para poder perdonar, en primer lugar, tu pareja debe alejarse totalmente de la persona con la que te fue infiel.
Debe abandonar las redes sociales si es necesario, o incluso cambiar de trabajo, si la tercera persona en discordia era compañera de labor.
No debe haber ningún tipo de contacto, pues de lo contrario, siempre habrá dudas, rencor, enojo y celos. Quien fue infiel debe mostrarse comprensivo con tu enojo y tu falta de confianza. Deberá poner lo mejor de su parte para volver a ganarla, si realmente ambos desean continuar con la relación que los une.
Honestidad
La honestidad de ambas partes, pero sobre todo de quien fue infiel, es fundamental para poder reconstruir la pareja sobre una sólida base de perdón y confianza. Cuando ves la honestidad de sus palabras y actitudes, poco a poco la confianza se va restableciendo y al cabo de un tiempo será posible disfrutar de una relación de pareja saludable y feliz.
Compromiso
El arrepentimiento y la honestidad en las actitudes deben reflejar un verdadero compromiso manifiesto a través de hechos concretos, orientados a reconstruir, fortalecer y trabajar sobre vuestra relación de pareja.
Evitar los reproches y las discusiones inútiles y, por qué no, hacer terapia de pareja, pueden ser algunas herramientas facilitadoras para lograr el perdón y la reconstrucción del vínculo.
Mantener la familia unida
En las parejas que tienen hijos pequeños, esta también puede ser una buena razón para el perdón: mantener la familia unida. Pero es enormemente importante que, antes de considerar este punto, se hayan cumplido los anteriores.
Es decir, una vez que tu pareja ha admitido el error, se muestra arrepentida de lo que hizo, expresa su voluntad de no repetir la situación y de continuar con la vida en pareja, el hecho de no desarmar la familia es un factor más a sumar para trabajar sobre el perdón de la infidelidad.
Pero sin duda alguna, ésta no puede ser la única razón. Si continúas con tu relación de pareja sólo para que los niños no tengan que vivir la separación de sus padres, pero en realidad ustedes no tienen un vínculo saludable y feliz, entonces los niños sufrirán, posiblemente más que si ustedes se separaran para rehacer sus vidas cada uno por su lado.
Perdonar es difícil, pero no imposible
La infidelidad se siente como una profunda traición, como una falta de aprecio o respeto hacia nuestra persona, es un puñal dolorosamente clavado en nuestro ego, es ver cómo se desvanecen muchas ilusiones sobre la vida en pareja, es como si se rompiera el frágil lazo de la confianza que los unía, es como un gran golpe en la cabeza que te deja totalmente desorientado, lleno de rabia y dolor.
Perdonar es difícil, pero hay un camino para lograrlo. El primer paso es reconocer los sentimientos que aparecen: rabia, dolor, enojo. Permítete sentirlos y liberarlos: llora, grita y patalea si es necesario.
Con el tiempo, el dolor pasará y podrás comenzar a perdonar, viendo en la otra persona a alguien que no es perfecto, que se equivocó pero que está arrepentido, desea mejorar para continuar una vida juntos y lo demuestra con sus actitudes.
Para perdonar es necesario aprender a soltar, a dejar el pasado atrás, aceptando lo que sucedió y tratando de utilizarlo de manera positiva, para aprender y fortalecernos.
La otra persona debe entender que durante un tiempo habrá cuestionamientos, dudas y desconfianza, y debe estar dispuesta a afrontar estas situaciones comprensivamente, hasta que las heridas sanen y la confianza se restablezca.
¿Y si no logras perdonar?
El perdón no es obligatorio o necesario. A veces la persona que fue infiel ni siquiera se arrepiente de sus actos, no se disculpa o no asume su responsabilidad y en estos casos, será imposible perdonar y restablecer una relación de pareja saludable.
En el caso de que haya en ambos un deseo y un compromiso de continuar trabajando juntos sobre vuestro vínculo, pero al pasar el tiempo no logras perdonar la infidelidad, tal vez haya otros temas de fondo para resolver, además de la infidelidad en sí misma.
En estos casos, posiblemente sea buena idea contar con ayuda profesional por parte de un psicoterapeuta por ejemplo.
En resumen, perdonar no es fácil, pero es perfectamente posible. El camino comienza con el deseo de darse una nueva oportunidad, dejar el pasado atrás y mirar hacia adelante con esperanza, con el compromiso muto de poner lo mejor de cada uno para fortalecer la pareja nuevamente.
Comments